Como la mayoría de vosotros ya sabréis, cuando hablamos del popular centro multimedia Kodi, nos referimos a un software de código abierto que podemos descargar de manera gratuita pero que, a pesar de todo lo que se habla del mismo, en principio no tiene nada que ver con la piratería de contenidos con derechos de autor, por lo que es un software legítimo y legal.
Sin embargo mucho se habla de mismo cuando se mencionan temas relacionados con el consumo de contenidos de vídeo de manera ilícita, ya que esta es una herramienta ampliamente usada para este tipo de prácticas. Pero nada más lejos de la realidad, de hecho los máximos responsables del propio proyecto en varias ocasiones han querido dejar claro que están en contra de este tipo de prácticas pirata, al tiempo que aseguran que lo que cada haga con su software, es responsabilidad del mismo, no del creador del programa.
Y es que buena parte de la polémica en este sentido viene dada por los add-ons o complementos que se integran en este programa y que en gran medida aumentan su funcionalidad. No es que estos elementos tengan nada de malo, ya que muchos de ellos se han diseñado para
Una vez en este apartado, nos decantamos por el directo que reza “Sistema”, en el que pinchamos y, situándonos en la opción llamada “Add-ons” de la lista que aparece a la izquierda de la nueva ventana, en el derecho ya podremos acceder a lo que buscamos, por lo que nos situamos con el ratón en “Gestionar dependencias”. Pues bien, a continuación se va a cargar un listado con todas estas dependencias que con el paso del tiempo se han ido agregando a los complementos de Kodi, por lo que ya podremos actualizarlas, especificar que en el futuro se actualicen por sí solas, desactivarlas, o desinstalarlas.
Eso sí, para terminar os diremos que debemos tener cuidado con estas dos últimas opciones que os hemos mencionado, o al menos saber a ciencia cierta lo que estamos haciendo, ya que el simple hecho de desactivar o eliminar una determinada dependencia, podría influir de manera directa en un determinado complemento que usamos habitualmente, incluso dejándolo inutilizado o con un funcionamiento incorrecto.