Linux cada vez tiene mayor popularidad entre los s. Y es que, hoy en día, el sistema operativo que hace unos años era solo para «hackers» se ha convertido en un sistema totalmente accesible para todos los s. Microsoft incluso facilita el a Linux desde sus sistemas Windows 10 y Windows 11 gracias a una nueva característica conocida como «Subsistema de Windows para Linux«. Sin embargo, ¿realmente este subsistema es lo suficientemente completo, o es mejor instalar una distro Linux real en el PC? Vamos a verlo.
Cuándo usar WSL
La verdad es que la llegada del subsistema a Windows pilló por sorpresa a muchos s, y es que Microsoft no siempre se ha llevado tan bien con Linux como para incluirlo como parte de su propio sistema operativo. Gracias a esta función es posible cargar un Kernel completo de Linux por encima de Windows, gracias a Hyper-V, que nos permite ejecutar cualquier comando o programa de Linux directamente desde una consola en Windows. Gracias a WSL podemos tener un sistema operativo híbrido, con lo mejor de ambos sistemas, perfecto para programadores y desarrolladores que necesiten usar ambos sistemas al mismo tiempo.
Por un lado, podemos usar una distro Linux, como Ubuntu, tal como ha sido diseñada por sus desarrolladores. Es decir, vamos a tener un sistema operativo mucho más sencillo de usar, con una GUI, y que nos va a demostrar realmente lo que es capaz de hacer. También esta es la forma en la que vamos a aprender mucho más sobre cómo funciona este sistema operativo, y además aumentaremos la cuota de mercado de Linux, lo que se traduce en mejor soporte, más apoyo por parte de los desarrolladores, y mejor soporte de hardware.
Además, si necesitamos en cualquier momento volver a Windows, bastará con reiniciar, elegir el nuevo sistema operativo en el menú del Dual-Boot, y listo.