En el momento en el que nos disponemos a proteger el contenido de nuestro ordenador con algún tipo de software de seguridad, debemos elegir bien. Uno de los antivirus más populares y usados desde hace tiempo es el que nos ofrece AVG debido a las múltiples funciones que nos presenta.
Lo cierto es que tenemos la posibilidad de elegir entre una buena cantidad de títulos en este sentido para instalar en nuestro equipo y protegerlo. Es más, Microsoft de forma predeterminada nos ofrece Windows Defender al instalar su conocido sistema operativo. Pero muchos s aún prefieren utilizar soluciones más veteranas o externas para estas tareas. De ahí precisamente que, al instalar cualquier otro antivirus, el que viene predeterminado en Windows se desactiva automáticamente.
Una de las soluciones de seguridad de las que podemos echar mano es del mencionado
En el caso de que el antivirus de AVG detecte algún tipo de anomalía o fichero potencialmente peligroso, lo bloquea automáticamente. Esto es algo que se lleva a cabo con los archivos adjuntos peligrosos tanto de entrada como de salida. A su vez y de manera predeterminada el propio antivirus nos envía mensajes de advertencia acerca de enlaces sospechosos que nos pueden llegar a través de esta vía.
En resumidas cuentas, esta solución de seguridad cuando está activa analiza los archivos descargados que recibimos por correo, todo ello antes de que llegue a nuestro ordenador y bloquea los adjuntos potencialmente peligrosos. De este modo lo que realmente logramos es evitar la llegada de archivos ejecutables, comprimidos u ofimáticos con códigos maliciosos ocultos. Este tipo de movimientos por parte de los atacantes es bastante más habitual de lo que nos podríamos imaginar. Precisamente de ahí viene la importancia de esta funcionalidad que nos propone el antivirus de AVG.