El permiso que tu jefe no quiere que conozcas: no necesitas autorización ni se puede descontar del sueldo

A casi nadie le gusta ausentarse de su puesto de trabajo, entre otras cosas porque corremos el riesgo de perder el empleo, algo nada recomendable en estos tiempos. Pero también es verdad que en ocasiones nos encontramos ante ciertas situaciones un tanto delicadas.
Es más que probable que muchos de vosotros ya conozcáis los habituales permisos que podéis pedir a vuestro jefe para ausentarnos unas horas, o días, de vuestro puesto. Disponemos de permisos por mudanza, enfermedad o boda, por ejemplo. Tenemos la posibilidad de disfrutar de los mismos siempre y cuando avisemos con tiempo para que la empresa pueda tomar las correspondientes medidas. Pero estas ausencias que os comentamos de vuestro puesto de trabajo, no siempre las podemos programar.
Hablamos de determinados imprevistos que pueden surgir durante la jornada laboral en sí, y que pueden hacer que nos veamos en la obligación de ausentarnos del puesto. De hecho, en estas mismas líneas os vamos a hablar de un permiso al que tenéis derecho acogeros y que es bastante desconocido en términos generales. En concreto nos referimos al denominado permiso por fuerza mayor que podemos utilizar en determinadas circunstancias.
Cuándo usar el permiso de fuerza mayor
Aquí nos referimos a un permiso al que tienen derecho todos los trabajadores si se dan determinados casos que os vamos a describir a continuación. Tal y como os podéis imaginar, aquí os hablamos de situaciones inesperadas y especialmente sensibles con los que nos podemos encontrar a lo largo de la jornada laboral. Lo primero que debemos tener en consideración es que para tomarnos este permiso de fuerza mayor, no necesitamos autorización previa por parte de la empresa.
De ahí que a continuación os vamos a hablar algunas de las situaciones específicas en las que podéis echar mano de este permiso de fuerza mayor sin que la empresa os pueda poner ningún impedimento.
- Emergencias relacionadas con algún familiar directo.
- Recogida de los hijos al cargo por enfermedad o similar.
- Quedarnos en casa con los niños por la misma situación, estar enfermos.
- Lo mismo sucede con nuestros padres en el caso de que necesiten atención.
- Acompañar a los progenitores al médico.
Consecuencias de coger este permiso laboral
Es importante saber que este es un permiso que podemos tomar durante algunas horas, Y hasta un máximo de cuatro días laborables al año. Además, tal y como os comentamos antes, en un principio y para acogernos a un permiso de fuerza mayor, no necesitamos autorización previa por parte de la empresa.
Eso sí, es muy probable que más adelante sí que nos soliciten un justificante donde quede claro la razón por la que nos hemos tenido que ausentar del puesto de trabajo. Este nos lo puede proporcionar el médico, la residencia de nuestros progenitores, la dirección del colegio de los niños, etc. A su vez, otro de los apartados que más os interesa en este caso, es saber que este permiso por fuerza mayor es retribuido. Con esto lo que os queremos decir básicamente es que seguiréis cobrando el sueldo íntegro correspondiente a este período de tiempo, siempre y cuando no sobrepase los cuatro días al año establecidos.